Iglesia y religión
Santa Sede: Un político no puede ser católico y “pro-aborto” al mismo tiempo
VATICANO, 16 Ene. 03 (ACI).- Un político que se reclama católico no puede ser partidario del aborto, el control natal o la eutanasia. Así lo ha hecho evidente la nota doctrinal de la Congregación para la Doctrina de la Fe sobre “Algunas cuestiones relativas al compromiso y la conducta de los católicos en la vida política” que la Santa Sede dio a conocer este jueves.El documento de 15 páginas recuerda en efecto que el Papa Juan Pablo II, “en línea con la enseñanza constante de la Iglesia, ha reiterado muchas veces que quienes se comprometen directamente en la acción legislativa tienen la ‘precisa obligación de oponerse a toda ley que atente contra la vida humana’.
“Para ellos –agrega el documento- como para todo católico, vale la imposibilidad de participar en campañas de opinión a favor de semejantes leyes, y a ninguno de ellos les está permitido apoyarlas con el propio voto”.
“En tal contexto –sigue el documento-, hay que añadir que la conciencia cristiana bien formada no permite a nadie favorecer con el propio voto la realización de un programa político o la aprobación de una ley particular que contengan propuestas alternativas o contrarias a los contenidos fundamentales de la fe y la moral”.
La nota del dicasterio señala además que cuando la acción política “tiene que ver con principios morales que no admiten derogaciones, excepciones o compromiso alguno”, es cuando el compromiso de los católicos “se hace más evidente y cargado de responsabilidad”.
“Éste es el caso de las leyes civiles en materia de aborto y eutanasia (que no hay que confundir con la renuncia al ensañamiento terapéutico, que es moralmente legítima), que deben tutelar el derecho primario a la vida desde su concepción hasta su término natural”, dice claramente el documento.
“Del mismo modo, hay que insistir en el deber de respetar y proteger los derechos del embrión humano”, agrega.
“Análogamente, debe ser salvaguardada la tutela y la promoción de la familia, fundada en el matrimonio monogámico entre personas de sexo opuesto y protegida en su unidad y estabilidad, frente a las leyes modernas sobre el divorcio. A la familia no pueden ser jurídicamente equiparadas otras formas de convivencia, ni éstas pueden recibir, en cuánto tales, reconocimiento legal”.
De modo similar, a los políticos católicos, según explica el documento, les corresponde defender “la libertad de los padres en la educación de sus hijos”, “la tutela social de los menores” y “la liberación de las víctimas de las modernas formas de esclavitud”, incluyendo la droga y la explotación de la prostitución, “el derecho a la libertad religiosa” y “el desarrollo de una economía que esté al servicio de la persona y del bien común”.
“Finalmente –dice el texto-, cómo no contemplar entre los citados ejemplos el gran tema de la paz”.
No avergonzarse de ser católico
La Nota del Dicasterio denuncia que algunas asociaciones u organizaciones de inspiración católica han apoyado recientemente a “fuerzas y movimientos políticos que han expresado posiciones contrarias a la enseñanza moral y social de la Iglesia en cuestiones éticas fundamentales” que “son incompatibles con la pertenencia a asociaciones u organizaciones que se definen católicas”.
Al respecto, el documento señala que “es insuficiente y reductivo pensar que el compromiso social de los católicos se deba limitar a una simple transformación de las estructuras, pues si en la base no hay una cultura capaz de acoger, justificar y proyectar las instancias que derivan de la fe y la moral, las transformaciones se apoyarán siempre sobre fundamentos frágiles”.
“La afirmación de la libertad de conciencia y de la libertad religiosa –agrega el documento-, no contradice en nada la condena del indiferentismo y del relativismo religioso por parte de la doctrina católica, sino que le es plenamente coherente”.
Para citar este texto:
"Santa Sede: Un político no puede ser católico y “pro-aborto” al mismo tiempo"
MONTFORT Associação Cultural
http://www.montfort.org.br/esp/imprensa/igreja/igreja20030116_1./
Online, 22/12/2024 às 20:57:38h